¿Es mejor una buena casa o unos buenos hijos?

La mayoria del tiempo trabajamos duro para darle a nuestros hijos lo mejor. Nos esmeramos en complacerlos y nos aferramos a trabajar para poderles dar todo lo que nosotros no tuvimos a su edad o por darles la mejor educación. Está bien que como padres siempre queramos lo mejor para ellos, pero es inminente recordar que al final del camino, lo que mas le importará a nuestros hijos y lo que hará una verdadera diferencia en sus vidas no es el saber que tuvieron todo lo que querian, sino que verdaderamente fueron amados y equipados para amar a su propia familia cuando la tenga.

La vida está llena de ocupaciones, eso es indudable. Es importante que aprendamos a priorizar y reconozcamos que independientemente de lo material, lo primordial es darle a nuestros hijos un buen ejemplo, nuestro tiempo,valores, pero sobre todo: nuestro amor incondicional.

No es suficiente amar a nuestros hijos, sino que es necesario que ellos esten conscientes de que son amados. Debemos no solo tratarlos bien, sino que ellos necesitan escucharlo de nuestra boca. El decirle "hijo te amo," "hija te amo," es importantisimo. No solo cuando son pequeños y buscan por si solos un abrazo, sino tambien cuando estan en la adolescencia y voltean los ojos por todo. Cuando se comportan apáticos y parece que no quieren nada con nosotros. Ahi es cuando ellos mas necesitan de nuestra afirmación y cuando mas necesitan escuchar que son amados inmensa e incondiconalmente.

Tengamos siempre presente que nuestros hijos son un préstamo de Dios que fue confiado en nuestras manos para amarlos, cuidarlos, y educarlos, pero además para que por medio de ellos, aprendieramos el verdadero concepto de lo que es el amor, no como emoción o sentimiento, sino como fundamento.

Que no nos gane el tiempo ni las ocupaciones. Amemos y hagamos saber a los que amamos que son amados. La familia es una bendición. Disfrutemos y seamos agradecidos por la nuestra. Sea que tengamos una familia nuclear, o una familia con un solo padre, sigue siendo una familia. Amemos mucho y expresemoslo con hechos, pero tambien con palabras.

Nuestros hijos prefieren escuchar de nuestra boca un "te amo," que leer en las redessociales: "cuanto amo a mi hijo." Disfruta a tu familia como si fuera el último dia.

"»¿Quién de ustedes que sea padre, si su hijo le pide un pescado, le dará en cambio una serpiente? ¿O, si le pide un huevo, le dará un escorpión? Pues, si ustedes, aun siendo malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a quienes se lo pidan!»" Lucas 11:11-13

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